Acumuladores de agua la solución óptima para el hogar
Los acumuladores de agua son la solución para obtener el máximo confort en nuestro hogar, ya que son capaces de cubrir todas aquellas necesidades que puedan presentarse, además se convierte en una exigencia por su gran capacidad de almacenamiento de agua sanitaria.
Existen dos tipos de acumuladores de agua caliente sanitaria, dependiendo de donde esté ubicada la fuente energética y el intercambiador de calor, por lo cual son clasificados de la siguiente manera:
El confort del agua caliente sanitaria con el uso de acumuladores de agua
Acumuladores directos: Son los que contienen en la parte interna la fuente energética de calentamiento del agua caliente sanitaria. Se encuentra representada por una resistencia eléctrica o un quemador de gas, todo depende del tipo de que se trate, presenta una desventaja si tomamos en cuenta que la resistencia o el quemador son de baja potencia, tienen tiempos de calentamiento elevados y no pueden satisfacer consumos prolongados de A.C.S. Cuando el acumulador se vacía hay que esperar algún tiempo sin darle uso hasta que el aparato se recupere.
Acumuladores indirectos: Son aquellos que deben estar conectados a una fuente energética externa, el cual necesitaría un intercambiador de calor adicional para calentar el A.C.S.
Los intercambiadores poseen de forma integrada en el mismo aparato el intercambiador, mientras que los depósitos acumuladores tienen la necesidad de ser conectados a un intercambiador de calor externo para dar ejecución a su funcionamiento, todo depende de la capacidad del intercambiador para que su funcionamiento sea bueno o deficiente. Lo ventajoso de estos acumuladores indirectos es que con una fuente de calor y un intercambiador bien seleccionado puede satisfacer grandes demandas de punta de A.C.S. así como los consumos prolongados, porque poseen agua caliente acumulada y además también están calentando de manera instantánea el agua.
El depósito que es destinado para la acumulación de agua, bien sea para uso doméstico como los grifos y duchas, puede tener una capacidad muy variable que va desde 15 litros hasta los 1000 litros. Posee ventajas como el suministro de agua caliente a temperatura constante y la temperatura en ningún momento se ve afectada por la apertura o cierre de otras llaves conectadas al mismo calentador.
Se recomienda tomar en cuenta la calidad del aislamiento térmico, porque un aislamiento deficiente puede provocar que se escape el calor del agua al ambiente, lo que ocasionaría que el calentador gaste más energía para volver a recuperar la temperatura.
Por lo general, también es recomendable que un técnico especialista realice una comprobación al igual que una limpieza de los acumuladores de agua caliente en intervalos de dos años.
cun
