A partir del 1 de julio, entrarán en vigor las nuevas normas del IVA intracomunitario europeo, las cuales irán dirigidas principalmente al comercio electrónico.

El objetivo de este cambio es doble: simplificar los procedimientos al disminuir la carga administrativa de las empresas, y reducir la brecha del IVA previsto y del IVA recaudado en los Estados miembros. ¿Cómo va a verse afectada la gestión del impuesto en el comercio electrónico?

Pérdidas millonarias

La diferencia entre el IVA que se espera recaudar y el que ingresa efectivamente llegó a ser 140.040 millones de euros en el 2018 entre todos los Estados, la última cifra publicada. Significó ese año una disminución de 1.000 millones de euros con respecto al año anterior, habiendo seguido la tendencia de la reducción de la brecha durante los últimos años.

El desfase en España fue de 4.909 millones, siendo el sexto mayor de la Unión Europea. El primero es el de Italia (35.439 millones), luego Alemania (22.077 millones), Francia (12.788 millones), quedando en cuarto y quinto puesto Rumanía (6.595 millones) y Grecia (6.570 millones), respectivamente.

Sin embargo, el temor porque esta tendencia se haya revertido ha surgido de nuevo como una consecuencia de la pandemia; se estima que en 2020 la pérdida potencial haya sido de 164.000 millones de euros, una cifra alta considerando la del 2018.

Grandes cambios

La medida empezará a estar vigente seis meses más tarde de los previsto como consecuencia de la misma crisis. Busca simplificar los procesos, debido a la poca claridad de las condiciones actuales, en especial en cuanto al creciente comercio electrónico. Aún así, el trabajo de Marosa y otras firmas fiscales seguirá siendo imprescindible.

Ventanilla única del IVA

Anteriormente, las empresas debían registrarse en cada país antes de operar para poder declarar el IVA y pagarlo. La nueva medida elimina este requisito: ahora las empresas podrán declarar y pagar el impuesto de todas las ventas intracomunitarias en la administración de su propio país y en su propio idioma en una única declaración trimestral.

Como consecuencia, la nueva plataforma, la ventanilla única o One Stop Shop (OSS) del IVA, se podrá utilizar sobre todos los bienes y servicios que se venden por Internet en toda la UE, sin importar si las ventas son transfronterizas o no. Además, esto hará que se reduzcan los costes de cumplimiento de las empresas hasta 2.300 millones de euros al año.

Las dos únicas excepciones serán que los proveedores estén establecidos en el mismo país de la UE que las empresas, o que el importe de los servicios y productos electrónicos supere los 10.000 euros.

Ventanilla única de importación

O IOSS, está pensada para facilitar la recaudación, declaración y pago del IVA para vendedores externos a la Unión Europea cuyas ventas se realizan en el territorio. Llevado a la práctica, significa que estos proveedores, tanto empresas como interfaces electrónicas, podrán hacer la gestión completa del IVA con las autoridades tributarias que prefieran.

Al hacer responsable a la empresa de la recaudación, declaración y pago del IVA, los clientes quedan exentos de tener que pagar el IVA de importación al momento de entregar los bienes. Además de facilitar la actividad empresarial, funciona como un sistema de protección y transparencia al consumidor ante los costes ocultos.

Deroga de la exención actual del IVA

La normativa anterior establecía que los paquetes que entren en la Unión Europea cuyo valor sea igual o inferior a 22 euros quedan exentos de la declaración y pago del IVA. Funcionaba como una vía para que los vendedores fraudulentos declararan bienes de un coste elevado a un precio inferior para evitar la declaración y pago del impuesto.

Además de suponer un beneficio económico para estos vendedores que se aprovechaban de la exención, ponía en desventaja a las empresas que sí respetaban la normativa y debían repercutir a sus clientes el IVA completo sobre los mismos productos. Ahora, la nueva normativa cierra esta ventana que se prestaba para el fraude.

Los cambios en la recaudación del IVA buscan evitar el fraude que se da en las transacciones intracomunitarias, especialmente por concepto de las ventas online. El hecho de facilitar la gestión al centralizar los trámites y regular el comercio electrónico contribuye a la mejor protección del comprador a la vez que se reduce la brecha del IVA previsto y del recaudado en la realidad.