Cuando la tercera ola de coronavirus está en su punto más álgido, muchas de las personas que conducen vehículos propios o de servicio público se preguntan si están en un espacio limpio e higienizado.

El temor es real en la mitad de estos conductores que reconocen que les cuesta conducir un vehículo que no esté correctamente desinfectado de todo tipo de amenazas víricas, bacteriológicas y de otra índole para su salud.

Los especialistas de Alvato Luxury Detailing creen que es importante que todos los propietarios se sientan preparados con coches que les de seguridad en el contexto actual, no sólo a nivel de conducción sino de habitabilidad y salubridad.

Por ello han detectado un incremento notable en las peticiones de desinfección de ciertas partes del vehículo como son el volante, tiradores interiores de las puertas, palanca de cambios, cinturones de seguridad y cristales.

Todas ellas son zonas en las que el contacto es habitual en la conducción y que consideran imprescindibles higienizar, además del interior del habitáculo y su atmósfera. Las toses y estornudos dentro del vehículo llevan las partículas a depositarse en muchas partes del coche y son las de más contacto las que más vigiladas en cuanto a desinfección deben estar.

Alvato también indica que estas peticiones no obedecen sólo a particulares sino también a conductores de taxis y otros medios de transporte público que reconocen su tranquilidad cuando su vehículo está correctamente limpio, higienizado y libre de virus y bacterias.

Como se puede percibir el factor psicológico es cada vez más importante a raíz de las crecientes cifras de contagios en nuestro país. La tranquilidad que se le ofrece al propietario o conductor de un vehículo de poder disponer de un coche limpio e higienizado es hoy en día un factor importante en la conducción que está casi a la altura de la seguridad.

Junto con la desinfección de los puntos antes mencionados, la correcta revisión de los conductos del aire del vehículo y su limpieza es también un punto más en el que hacen especial hincapié los conductores y propietarios.

Y es que garantizar que el aire que entra al interior del coche está limpio y libre de las bacterias y residuos microscópicos que se encuentran en dichos conductos es una forma de tranquilizar a todos los usuarios.