La Semana Europea de la Calidad, que se celebra los días 6 al 12 de noviembre con el lema para 2017 “La calidad transforma”, pone de manifiesto el protagonismo de la calidad en un entorno cambiante y en constante evolución. La Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) se suma a la iniciativa europea destacando el papel que juegan las más de 1.700 organizaciones acreditadas en España que, aportando seguridad y rigor técnico conforme a normas reconocidas internacionalmente, están impulsando una transformación de la economía española.
Estas entidades proporcionan confianza, no sólo al mercado, sino también a la Administración Pública, ya que contar con servicios acreditados es la manera más segura de identificar a aquellos evaluadores que ofrecen máxima fiabilidad en sus servicios.
Por este motivo, en la Semana Europea de la Calidad, ENAC recuerda a las empresas que necesiten los servicios de una entidad de certificación, de un laboratorio de ensayo o calibración, o de una entidad de inspección, que un proveedor acreditado permite a las empresas contar con una información fiable para la toma de decisiones y la gestión del riesgo al contar con la máxima competencia técnica, además de permitirles un ahorro de tiempo y costes al ver reducida la necesidad de repetición de evaluaciones y ensayos. Por otra parte, les permite también aumentar la aceptación de sus productos en otros mercados gracias a los acuerdos de reconocimiento que ENAC tiene firmados con las entidades de acreditación de más de 90 países.
Los ensayos, inspecciones y certificaciones acreditadas también ayudan a abrir nuevas oportunidades de negocio, dado que el uso de servicios acreditados se prima en los pliegos de contratación pública, además de demostrar la diligencia debida en caso de acciones legales.
Las entidades acreditadas por ENAC ofrecen servicios en todos los sectores económicos y sus garantías se traducen en seguridad para los consumidores en ámbitos tan diversos como la seguridad alimentaria e industrial, la protección de datos, el control del ruido, las transacciones electrónicas, la calidad asistencial al paciente, o incluso en cuestiones de compliance penal.
