¿Cómo tratar el alcoholismo?


¿Cómo tratar el alcoholismo?

Según nos advierten desde la Clínica Intad, de Madrid, el tratar el alcoholismo entraña un complicado proceso en el que hay que ir avanzando fase por fase, sin saltarse ninguna, lo que evitará que se pueda recaer nuevamente en el problema.

Lo primero que hay que hacer es apoyarse en la familia y/o en los amigos. Las personas que nos rodean tienen diferentes sentimientos y formas de actuar ante la bebida, siendo completamente necesario que salgan a la luz. Además, ellos deben de repartirse las responsabilidades, implicarse en el tratamiento.

Pasos para combatir el alcoholismo

Elaboración de una lista de razones para cambiar

Conseguir cambios es algo complicado para cualquier familia que tiene a un miembro que está atravesando este problema. Hará falta tiempo y muchos esfuerzos, así como asumir una serie de riesgos, para llegar a la tan ansiada recuperación.

Lo primero que deberíais confeccionar es una completa lista en dónde escribáis las cosas buenas que lograréis si apoyáis la sobriedad y si os mantenéis juntos para poder hacer el tratamiento.

Establecimiento de lazos de confianza

La confianza no es algo que se pueda conseguir de la noche a la mañana; siendo sinceros, hará falta un cierto tiempo para que se pueda confiar en una persona que tenga problemas con el alcohol; siempre puede haber dudas.

La falta de confianza puede ser devastadora, incluso hasta se puede convertir en un detonante de la bebida.

Para establecer una buena relación de confianza, conviene recordar estas 4 claves:

a)    Comunicación: Hay que tener una buena comunicación con los miembros del entorno familiar, aunque las cosas sean complicadas.

b)   Contribución: Todos los miembros deben de colaborar para crear nuevas vías de comunicación, evitar detonantes y buscar alternativas saludables a la bebida.

c)    Objetivos: El entorno del paciente tiene una cierta responsabilidad con él, por lo que tendrá que conocer sus objetivos y de qué manera los piensa llevar a cabo.

d)   Respeto: Los familiares deben guardar respeto hacia el paciente. De lo contrario, puede sentirse rechazado y volver a caer en las garras de la bebida.

Solo en el caso de que la familia sea capaz de comprender que es lo que le impulsa a beber, el tratamiento podrá conseguir la máxima efectividad posible.

Esto no quiere decir que los familiares o amigos no puedan decir lo que piensan, pero podrían aprovechar las terapias como lugares en los que expresarse; de esta manera, habrá una persona que se encargará de controlar la situación y de recomendar lo que es mejor en cada caso.

Establecimiento de comunicación

Uno de los mayores obstáculos que se encontrarán los alcohólicos es la falta de comunicación.  Aquellas pequeñas quejas que no se expresen, es posible que no tarden en convertirse en problemas mucho mayores que acaben por quebrar la confianza del entorno.

Nunca se debe tomar en broma un problema serio, se debe de hablar claro en todo momento, hacer lo imposible por evitar las discusiones en temas importantes, y evitar los enfrentamientos.

Inicio del tratamiento

Una vez que el alcohólico reconozca que tiene un problema, que pida ayuda y que se lo cuente a su entorno, deberá de someterse al reconocimiento de un facultativo para que este pueda hacer un diagnóstico avanzado. Este diagnóstico debe de incluir tanto la evaluación clínica de los diferentes factores psicológicos / biológicos / sociales que afectan a cada persona, como diferentes pruebas y test médicos.

Una vez que se haya concluido con la diagnosis, se tendrá que proseguir con un tratamiento hospitalario.

La desintoxicación del alcoholismo se puede entender de diferentes formas.

Por un lado, tenemos los tratamientos para el alcohol tradicionales: es decir, aquellos que se centran en controlar los síntomas que conforman la adicción; en otras palabras, controlan los síntomas del “síndrome de abstinencia”. Según estos tratamientos, el objetivo final es depurar el organismo, eliminando por completo el alcohol.

Ahora bien, los tratamientos más avanzados no solo implican este proceso de depuración, si no también la reparación de ciertos daños neuronales que se hayan podido producir en el cerebro a causa del alcohol, así como la reparación también de las funciones afectivas y cognitivas que puedan haber quedado afectadas. Aquí, más que de una desintoxicación, se habla de una neurorregulación.

Entre las terapias de alcoholismo Madrid más habituales podemos encontrar fármacos especializados, ayuda psicológicas, asociaciones de “Alcohólicos anónimos”; círculos de ayuda familiar…

Para concluir, es importante que sepas que el alcoholismo es una enfermedad, un tipo de adicción que afecta de forma radical al buen funcionamiento del cerebro. Afortunadamente, existe tratamiento para esta enfermedad y se puede salir de ella. Gracias al avance de la tecnología, cada vez sabemos más sobre cómo afecta el alcohol a nuestro cerebro y en base a ello, tenemos nuevos tratamientos con un nivel de efectividad muy superior.

Apoyo, confianza, tiempo y esfuerzo: claves básicas para superar el alcoholismo.

 

Más información en Madrid: http://www.adiccionesintad.com

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