Fibratel ha cerrado una facturación superior a los 12,73 millones de euros en el ejercicio que acaba de concluir. La firma española, que cumplirá este año su 25 aniversario, impulsó un 6% su cifra de negocio, con respecto al ejercicio anterior, cuando alcanzó un histórico incremento del 35%, en lo que supuso la recuperación de la compañía después de varios años de crisis económica.

Fundada en 1992, Fibratel ofrece servicios globales de comunicación a empresas e instituciones, desde sus sedes de Andalucía, Cataluña y Madrid, y se plantea para este nuevo ejercicio un ambicioso objetivo que le sitúe entre los principales players del mercado y unos ingresos cercanos a los 15 millones de euros.

Su director general, Carlos Sanz, ha planteado a sus cerca de 100 empleados el reto de convertirse en socio clave en proyectos de comunicaciones avanzadas y CPD.  “Tenemos una cartera de clientes bien dimensionada, los recursos y conocimientos necesarios para abordar los mayores proyectos y un amplio recorrido de crecimiento en el área de servicios. Lo tenemos todo para lograr este objetivo. Sólo hay que aportar FE (Felicidad y Equilibrio)”, afirmó jugando con las palabras, en el kick-off de la compañía que se acaba de celebrar en Madrid.

Los proyectos de infraestructura CPD siguen siendo el gran motor de Fibratel, con iniciativas que representan en algunos casos hitos tecnológicos, por su innovación y nivel de servicio. Por su parte, las áreas de comunicaciones y servicios son las que muestran mejores expectativas de crecimiento, gracias a las alianzas que mantienen con los principales fabricantes del sector TI.

El directivo aprovechó este encuentro anual para subrayar los momentos estrella del ejercicio, entre ellos, algunos de los proyectos desarrollados con éxito durante 2016; como las implantaciones Wi-Fi de Cisco Meraki, en varias sedes de una de las primeras cadenas hoteleras a nivel mundial, el despliegue  de red Wi-Fi y servicios corporativos con la solución basada en una app de geolocalización y beacons, para un centro comercial en Palma de Mallorca, o el CPD de un gran banco internacional en su sede de Madrid, en el que se ha construido completamente un CPD de 150 metros cuadrados, y más 150 metros de salas técnicas auxiliares, que ha incluido diseño, ejecución de obra civil, cableado, salas de baterías, UPS, grupos electrógenos, climatización perimetral por agua fría y commissioning.