En los alquileres es frecuente que surjan impagos siendo estos luego llevados a las empresas de recobro.
Como empresa dedicada al cobro de impagados de manera profesional nos gustaría daros una serie de consejos que consideramos como útiles.
Al arrendar una residencia, corremos el peligro de toparnos con un inquilino que no pague. En ocasiones hay que lidiar con un inquilino deudor o bien conflictivo. Afortunadamente contamos con una serie de herramientas que nos van a ayudar a eludir estas situaciones. La prevención es la mejor medida, de ahí que os daremos ciertos consejos para eludir localizarte con un inquilino deudor, que no va a hacer más que traerte inconvenientes.
Cobro impagados en los alquileres
Primeramente, puede ser una buena medida de prevención solicitar una fianza al comienzo del contrato de alquiler. Es una gran idea para crear un pequeño jergón que cubra un posible impago de tu inquilino deudor. Lo más frecuente es solicitar una mensualidad del alquiler como fianza auxiliar a la establecida por la LAU (Ley de Alquileres urbanos)..
Por poner un ejemplo, si arriendas tu piso por setecientos euros mensuales, puedes valorar si con solicitarles una fianza auxiliar de setecientos euros es suficiente, en el caso de tener referencias, o bien por contra, mil cuatrocientos en el caso de que no dispongas de referencias o bien no te ofrezcan ninguna garantía auxiliar o bien aval y/o la residencia alquilada sea amueblada.
Otra herramienta que nos puede asistir a eludir inconvenientes con un inquilino deudor es pedir acredites para eludir deudas. Que tu inquilino tenga un aval es un homónimo de seguridad, puesto que los inquilinos menos aconsejables no acostumbran a tenerlo. Si bien en todo caso, se puede solicitar un aval personal solidario, que puede corresponder a una persona de confianza de tu inquilino, como un familiar o bien un amigo, mas asimismo se va a deber medir la solvencia económica de este avalista a través de su nómina de trabajo y su patrimonio personal.
En ciertos casos se solicitan avales. Estos acredites hacen que los inquilinos se echen atrás, por el hecho de que un aval acostumbra a costarles bastante dinero, en general se solicitan 6 meses de las rentas de alquiler a un año, más comisiones extras por la parte del banco. Por consiguiente, un aval solo es conveniente en casos muy específicos.
Por último os charlamos de los seguros de impago contra inquilino deudor. De igual modo que existen seguros para una residencia contra incendios o bien hurtos, asimismo se puede asegurar contra el impago de un inquilino deudor e inclusive por los posibles desperfectos que estos puedan causar.
En un caso así, dispones de empresas de seguros que ofrecen seguros contra impagos y también inquilinos deudores. La mejor forma de eludir esta clase de situaciones, es tan simple como procurar prevenirlas o bien en su defecto tomar las medidas cautelares precisas. Es por esta razón que para asegurar el cobro de las rentas de alquiler frente a la situación de que un inquilino deudor, es contratar un seguro de impago de alquileres. Estos seguros resguardan a los dueños de residencias en alquiler frente al impago de de las rentas de alquiler garantizando 12 mensualidades, las costas de un proceso de desahucio (abogados, procuradores, tasas judiciales…) y si a lo largo del proceso de desahucio por la parte de los inquilinos han efectuado actos salvajes al continente de la residencia, asimismo habitúan a quedar cubiertos.
