Apenas han transcurrido dos meses desde que el 31 de diciembre se comunicaran a la Organización Mundial de la Salud varios casos de neumonía en Wuhan, una ciudad de la provincia china de Hubei, provocados por un virus de la familia de los coronavirus.

Desde entonces hasta ahora, la epidemia se ha extendido a 80 países y afectando a unas 90.000 personas. El foco principal sigue fijado en la provincia de Hubei, pero dos focos descontrolados en Irán e Italia han exportado decenas de casos a otros países, como España, en donde recientemente se ha certificado la muerte de un hombre con coronavirus.

Cabe destacar que este virus afecta de manera muy leve a los menores, de manera que la población de riesgo son las personas de mayor edad o de salud delicada, especialmente en enfermedades crónicas respiratorias.

Sintomatología

Este coronavirus, conocido oficialmente como SARS-CoV-2 afecta a las vías respiratorias y puede provocar desde un cuadro leve (en la mayoría de los casos), con tos seca y fiebre, a síntomas mucho más graves, como insuficiencia respiratoria aguda y neumonías que pueden ocasionar la muerte, aunque en porcentajes muy bajos. Así, el porcentaje de fallecimientos por la enfermedad oscila entre un 2 y un 4% en China y alrededor de un 0,7% fuera del país asiático.

Una de las características de este coronavirus es su alto nivel del contagio, lo cual ha facilitado su expansión por todo el mundo. En España, los casos crecen y se acercan a los 200. En Europa, el avance de la epidemia toma fuerza en el norte de Italia, con más de 2.500 casos.

Causas del contagio

Aunque el mecanismo de contagio no está determinado con precisión, los expertos de la OMS plantean la hipótesis, por analogía con otras infecciones similares, de la transmisión por el contacto con secreciones que el portador del virus genera al toser o estornudar. También creen que es posible infectar a otra persona en el período de incubación, aunque este extremo tampoco está confirmado. Se apunta que el virus se ha originado desde un animal, pero tampoco se puede precisar qué animal lo portaba, ni el momento en el que saltó del animal a una persona.

Debido a la globalización, el virus ha conseguido salir de las fronteras chinas y establecer diferentes focos en todo el mundo, como los mencionados de Italia e Irán. En el caso de España, la mayoría de contagiados lo han sido por estar en contacto con personas que habían viajado al país europeo.

Medidas preventivas

Las autoridades sanitarias españolas han trasladado a los ciudadanos una serie de medidas a tener en cuenta para evitar el contagio. Una de ellas es la recomendación de no viajar a los lugares en donde los focos son más importantes, como China e Italia y también recomendar el teletrabajo para evitar contagios en el centro de trabajo.

Es de destacar que el uso de mascarillas sanitarias no evita el contagio de la enfermedad si la persona está sana y que la medida preventiva más importante es la de la limpieza y la higiene. Por este motivo numerosas organizaciones están pidiendo a sus proveedores de limpieza de oficinas que éstas se hagan de una manera más exhaustiva y con profunda desinfección y con una mayor regularidad.

Higiene personal

Es importante seguir una serie de recomendaciones de higiene personal. La empresa especializada en productos y servicios higiénicos PHS Serkonten nos da una serie de consejos para la prevención de coronavirus, especialmente en lo referido al lavado de manos con agua y jabón. Según podemos leer en sus consejos, el correcto lavado de manos con agua y jabón evita el 44% de las enfermedades diarreicas y el 25% de las infecciones respiratorias. Para más información al respecto, haz click aquí.

Y es que, lavarse las manos con frecuencia es la mejor de las recomendaciones para evitar el contagio, utilizando gel desinfectante o alcohol. Al toser o estornudar, es necesario cubrirse la boca y la nariz con el codo flexionado o con un pañuelo. En el caso de utilizar un pañuelo, debe tirarse inmediatamente y lavarse las manos posteriormente.

Otras medidas

También se recomienda mantener una distancia de un metro con las demás personas, particularmente aquellas que tosan, estornuden o tengan fiebre; evitar tocarse los ojos, nariz o boca. También debe manipularse la carne cruda o la leche con cuidado para evitar la contaminación cruzada con alimentos crudos.

En cualquier caso, ante la menor sintomatología de fiebre, tos o dificultad para respirar, es imprescindible acudir a la atención médica, indicando si ha viajado o ha estado en contacto con personas que hayan estado en zonas en las que se haya notificado la presencia del coronavirus. En el caso de no tener constancia de contacto con estos países se recomienda al paciente quedarse en casa hasta que los síntomas remitan.