LAS PERLAS: MARAVILLAS NATURALES.
El mundo de la joyería y la bisutería a ido evolucionando al paso del tiempo y abarcado un número gran variedad de artículos, desde un colgante de perla hasta las pulseras hechas a mano. Hay en existencias una amplia gama de de perlas finas para joyeria en cualquier parte del mundo. El precio de estas piezas varía en función del proceso de fabricación y de los materiales utilizados. Dentro de los objetos más preciados estan las perlas.
La variedad más asequibles de estas de las perlas son las de agua dulce. Estas perlas, a diferencia de las perlas de agua salada, se cultivan sin un núcleo, por lo que se componen de nácar sólido. En otras palabras, las perlas de agua dulce son perlas sólidas. Esto es los que las hace más asequibles, ya que el volumen de perlas de agua dulce producido supera en gran medida el volumen generado de todas las otras variedades de perlas.
Con relación al costo, la variedad de perlas de agua dulce de Akoya son considerados la opción clásica de todos los tipos de perlas, debido a que en este lugar se han cultivado y comercializado con éxito en el mercado desde hace casi 100 años. Las perlas de Akoya fueron consideradas en algún momento piezas muy caras, pero en la última década, los precios han caído al nivel más bajo jamás antes visto, por lo que ahora son mucho más asequible que en antaño.
Después de las perlas de Akoya están la perla de Tahití. Estas exóticas piezas naturales son de color oscuro y provienen de los atolones volcánicos de la Polinesia Francesa. En algún momento de la historia fueron la variedad más cara de todas las perlas en el mercado.
La más costosa de todas las variedades de perlas cultivadas son los que crecen en los máximos de Pinctada, en el Mar del Sur. Son las perla de la ostra. Estas también son las que tienen una mayor variedad de perlas, con un tamaño medio que varía de 12 a 15 mm, pero se han logrado conseguir algunas tan grandes que alcanzan los 20 mm.
Las perlas naturales tienen un precio elevado debido al tiempo que toma la formación de cada una de ellas. Esto sucede cuando las ostras se van al fondo del mar. Una vez allí, abren un poco su concha para dejar entrar a los organismos microscópicos, como el plancton, que le sirven de alimento. Junto con el plancton tambien se introduce agua y junto con ella a veces se entra un grano de arena, un animal diminuto o alguna otra partícula que irrita a la ostra. Por eso, empieza a segregar como un mecanismo de defensa el nácar, con el cual cubre la partícula que le esta causando la irritación. Cuando nuevamente le causa una molestia vueve a segregar nácar. Este proceso lo realiza por mucho tiempo hasta convertirlo en una perla. Pueden tardar entre tres y seis años como promedio hasta que esta se forma.
