En un innovador procedimiento de ingeniería de tejidos, los médicos en los EE. UU. Utilizaron las propias células madre del paciente para ayudar a un niño de 14 años con una extraña condición genética rara que lo dejó con pómulos subdesarrollados y en parte faltante para desarrollar hueso facial nuevo. Dicen que la operación exitosa aumenta enormemente las opciones de cirugía reconstructiva disponibles para los pacientes con desfiguraciones del hueso facial, incluidos los que han estado en accidentes automovilísticos, soldados heridos en la batalla y también pacientes con enfermedades hereditarias.

Los médicos del Centro Médico del Hospital Infantil de Cincinnati tomaron células madre del tejido adiposo de Brad Guilkey y las combinaron con proteína de crecimiento y tejido donado para ayudarlo a desarrollar huesos viables de las mejillas. Brad, que ahora tiene 15 años, se sometió a la parte quirúrgica principal del procedimiento a principios de este año, el 28 de mayo.

Brad tiene una rara afección conocida como síndrome de Treacher Collins, donde los huesos cigomáticos a ambos lados de la cara no estaban desarrollados. Los huesos cigomáticos forman la prominencia de la mejilla y parte del borde externo de la cuenca del ojo.

No tener la protección habitual del hueso alrededor de las zonas inferiores y laterales de las cuencas de los ojos no solo afectó la apariencia de Brad, sino que también puso al adolescente activo en mayor riesgo de lesiones en los ojos.

El Dr. Jesse Taylor, cirujano e investigador de la División de Cirugía Plástica Craneofacial y Pediátrica de Cincinnati Children's, dijo a la prensa que:

"Este hueso es estructuralmente crítico y actúa como un amortiguador para la cara, protegiendo los ojos y otras estructuras críticas en caso de impacto facial".

"Este joven es extremadamente activo, le encanta jugar al baloncesto y al béisbol, y cultivar hueso nuevo en esta área de su estructura craneofacial es sumamente importante para él", explicó.

La operación de Brad durante todo el día parece haber sido exitosa. Más de cuatro meses después de la cirugía, las tomografías computarizadas (TC) muestran que los pómulos se rellenaron normalmente con hueso viable. No solo están mejor protegidos sus ojos, sino que también mejora su apariencia, y se planea una cirugía de retoque adicional para eliminar la inclinación hacia abajo de los ojos que es característica del síndrome de Treacher Collins.

Durante la operación, los cirujanos usaron una pieza de hueso donado para hacer implantes o aloinjertos de "andamiaje" para guiar el crecimiento de hueso nuevo. Perforaron agujeros en el aloinjerto y los llenaron con células madre mesenquimales de la grasa abdominal de Brad.

Las células madre mesenquimales tienen el potencial de convertirse en una variedad de tipos de células, incluido el tejido conectivo y el hueso, lo que le da al cuerpo una reserva de células de reemplazo a medida que mueren las células más viejas. Las proteínas de crecimiento controlan lo que les sucede al enviarles señales diferentes para convertirse en células para diferentes tipos de tejido, según las necesidades del cuerpo.

Los médicos inyectaron los aloinjertos de las mejillas de Brad con la proteína morfogénica de crecimiento ósea proteína 2 (BMP-2), que instruye a las células madre mesenquimales para que se conviertan en células óseas u osteoblastos.

Taylor dijo que el nuevo procedimiento aumenta enormemente las opciones quirúrgicas disponibles para ayudar a reparar el daño óseo causado por lesiones traumáticas, por ejemplo las sufridas por soldados heridos y víctimas de accidentes automovilísticos, así como pacientes como Brad cuya deficiencia ósea es causada por una enfermedad o una enfermedad genética. condición.

Las estimaciones sugieren que unos 7 millones de estadounidenses tienen algún defecto en la continuidad ósea que es tan grave que es difícil de reparar.

Como Taylor pasó a explicar:

"Los métodos actuales que tenemos, como tomar hueso de otra parte del cuerpo o implantar hueso de un cadáver o algo artificial, son alternativas razonables, pero mucho menos que perfectas".

Además, muchas cirugías reconstructivas que usan métodos actuales tienen una alta tasa de fracaso porque usan tejido del donante, que el cuerpo a menudo rechaza. Y los procedimientos que usan material tomado de otra parte del cuerpo del paciente a menudo pueden dejarlos desfigurados.

Taylor dijo que el nuevo procedimiento evita ambos problemas al usar las propias células madre del paciente. Desarrollaron el procedimiento al principio usando cerdos en Cincinnati Children's, y descubrieron que podrían impulsar el proceso normal del cuerpo para convertir las células madre mesenquimales en células óseas usando BMP-2.

Dr Donna Jones, un investigador en el equipo científico que realizó experimentos que condujeron al procedimiento dijo:

"Solo necesitamos usar una cantidad bastante pequeña de proteína morfogénica ósea para que sirva de señal para decirles a las células madre mesenquimales que se convertirán en hueso".

"Los mecanismos moleculares reales que utiliza BMP-2 para hacer esto no se comprenden bien, pero una vez que usamos BMP-2 para iniciar el proceso, los procesos biológicos propios del cuerpo toman el control y produce su propio BMP-2 para continuar la transformación". Ella explicó durante una conferencia de Aumento de pómulos en Barcelona

Una parte delicada del procedimiento fue la extracción del tejido del muslo de Brad y su envoltura alrededor del aloinjerto del donante para generar la membrana delgada llamada periostio que recubre las superficies óseas. El periostio es importante para producir BMP-2 de forma natural en el cuerpo y también ayuda a suministrar sangre para nutrir al nuevo hueso.